Entre el envite del frío, que no quería llegar y ahora nos invade noche y día, y las comidas copiosas, está uno como en una nube extraña, recuerdo de pequeño (y menos pequeño también) las ganas que le tenía a la navidad, a ver si llega, los preparativos... Se hizo este año, y ha sido el que menos espíritu he demostrado, curiosamente, pero no he cambiado mucho, se me hace realmente curioso, pero me gustaría recuperar parte de esa chispita añorada y dar un salto para reencontrarme con la navidad tal y como la sentía hasta ahora, supongo que estoy a tiempo.
Llega el fin de año, momento que a mí siempre me estimula bastante, soy de esas personas que suele hacer balance, aunque con moderación, y que se pide mejorar no de año en año, pero sí un poco en todo, y ahora es buen momento para saber dónde estamos y hacia donde caminamos, si es que la espesura del camino deja entrever el lejano horizonte, que haberlo haylo.
Caminos de noche y de día
que cierren paso a la tristeza
que abran camino a la alegría
Caminos largos, espesos, tortuosos
todos ellos con sentido
trazados sin pensar en el caminante
que ansía calma que no encuentra
que tiene todo menos paciencia
Parecía bueno tu camino,
el mío, el suyo, el nuestro
creía en tí y en tu beso
hoy todo se vuelve fuego,
ceniza, desierto,
y caminaré por mundos inciertos.
Momentos de rabia,
de angustia, de miedo,
días de mucho, de poco, de cero.
Pero debo siempre un paso al centro
las fuerzas por no caminar,
me queman por dentro,
he de dar un paso más
para que el siguiente salga de dentro.
No encuentro el valor, ni las ganas, ni me lo creo
pero el paso de hoy
es oro en el futuro de mi tiempo
y aunque me duela por dentro
mis piernas pueden, deben y saben hacerlo.
Caminaré duro, largo, recio, recto,
llegaré al horizonte, ese que hoy no veo
llegaremos a buen puerto
sin duda que lo lograremos.
Con el tiempo, ese viejo aliado
que siempre llamamos enemigo
que tanto nos dió para aprender
y que a veces apartamos al olvido.
que cierren paso a la tristeza
que abran camino a la alegría
Caminos largos, espesos, tortuosos
todos ellos con sentido
trazados sin pensar en el caminante
que ansía calma que no encuentra
que tiene todo menos paciencia
Parecía bueno tu camino,
el mío, el suyo, el nuestro
creía en tí y en tu beso
hoy todo se vuelve fuego,
ceniza, desierto,
y caminaré por mundos inciertos.
Momentos de rabia,
de angustia, de miedo,
días de mucho, de poco, de cero.
Pero debo siempre un paso al centro
las fuerzas por no caminar,
me queman por dentro,
he de dar un paso más
para que el siguiente salga de dentro.
No encuentro el valor, ni las ganas, ni me lo creo
pero el paso de hoy
es oro en el futuro de mi tiempo
y aunque me duela por dentro
mis piernas pueden, deben y saben hacerlo.
Caminaré duro, largo, recio, recto,
llegaré al horizonte, ese que hoy no veo
llegaremos a buen puerto
sin duda que lo lograremos.
Con el tiempo, ese viejo aliado
que siempre llamamos enemigo
que tanto nos dió para aprender
y que a veces apartamos al olvido.
Edu 2006
2 comentarios:
"Por más que uno quiera y más difícil sea, cuando toca esperar, se espera"
Antonio Orozco
Muy buena la composición, si señor... me quito el sombrero :)
Por cierto, cada paso nos hace mas fuertes y nos hace crecer también (si no, que se lo digan a esos botones clásicos de webdeful que tú aún recuerdas y AHORA estan en el olvido) ;)
¡ABRAZO!
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