miércoles, mayo 16


Iré a despedirme de ti, a verte de nuevo una vez más, aunque te has mostrado muy poco esta temporada, pero sí, estaré en tu marcha, como suelo hacer siempre, sólo tú me purificas con tu sonrisa blanca y pura, me devuelves al inicio de los tiempos y sé que contigo todo es posible, pues así me lo has mostrado siempre.



Te Quiero.

viernes, mayo 4

En perfecta formación


Estábamos todos juntos, como encerrados, esperando el momento para gritar, pero no había nadie en el escenario. Nos dimos la vuelta resignados, pero con una sensación extraña, sabíamos que algo podría suceder en cualquier momento.


No sé quién empezó, pero nos contagiamos uno a uno, fue increíble, nos miramos, y sin hablar empezamos a caminar, primer de forma lenta, y poco a poco fuimos trotando.


En cuanto empezamos a correr todo se transformó, a medida que me esforzaba más iba perdiendo la ropa y veía cómo salían plumas de mi propia piel, no podría imaginar lo que sucedería minutos después.


Algunos cayeron agotados, exhaustos del esfuerzo, pero nos ayudábamos para levantarnos y continuar, y cada vez con más ansia, como si la vida estuviera a pocos kilómetros, ni siquiera podía mirar el cielo negro que se cernía sobre todos los que seguíamos intentándolo…


Llegó un momento clave, las fuerzas comenzaron a multiplicarse, y las plumas cubrían ya nuestros cuerpos como si fuéramos pájaros gigantes, los brazos pasaron a ser una especie de alas que nos daban un impulso increíble, no éramos capaces de distraer la mirada, sólo seguir en el empeño, que parecía cercano, cada vez más.


Pude ver cómo algunos compañeros empezaron a flotar, otros daban saltos gigantes, yo ya me mantenía en el aire durante unos segundos, pero al caer volvía a correr cada vez mejor, cada segundo más rápido, nunca miré hacia atrás.


Y de repente, empezaron a volar los que iban en la parte delantera del grupo, inmediatamente y para mi sorpresa ya no pisaba el suelo, mi velocidad era incalculable, impulsado ya por mis largas y esbeltas alas, de un magistral pelaje, yo era capaz de volar, de subir al cielo sin esfuerzo aparente.


Mientras todo esto sucedía, no podíamos hablar, lo único que se escuchaban eran gritos de sorpresa.


Pronto fuimos alineándonos en forma de cuña, cual verdaderas aves emigrando, cada uno en su posición, ocupando un cielo donde empezaba a salir el astro rey, un sol que inundaba todo, y que era imposible de mirar directamente debido a la intensidad con la que brillaba.


No sabemos dónde vamos, ni sabemos qué está sucediendo, pero seguimos con rumbo fijo al infinito desde entonces, con la mirada en el horizonte y en perfecta formación.


Lo que sí sabemos es que lo vamos a lograr.

jueves, mayo 3

El camino hacia el comienzo

Todo había sido tan extremadamente parecido, su vida era como una réplica constante, el día de la marmota una y otra vez, pero llegó un punto de no retorno, se planteó romper con ello de forma abrupta, abandonar ese camino y permanecer al margen de cualquier movimiento, pasando a ser un mero espectador tan estudioso como pudiese, de tal forma fue aprendiendo de alguna manera, y no cedía en su empeño, el más mínimo error le podría llevar de nuevo a un estadio más o menos previsible, una circunstancia que ya no quería volver a repetir.

Y día tras día fue armando su coraza de valor y empeño, dibujando un modelo que si bien pareciese parco desde la lejanía, tenía la riqueza que necesitaba, de hecho, no sabía cuánto tiempo iba a durar su aprendizaje, pero sí sabía que algo estaba ganando, y era el tiempo mejor invertido de su corta existencia.

A veces, las tardes le regalaban el más bonito anochecer posible, siempre aprovechaba para disfrutarlo en calma, y esa paz le iba colocando cada cajón, cada mueble dentro de su cabecita.

Lo que era extraño al principio, se hizo ritual, y empezó a ser una costumbre, seguía observador y vigilante de todo aquello cuanto pasaba por sus ojos, dejando también el trabajo a su poderosa imaginación, así pasaba de una sencilla historia a un bonito episodio endulzado por todo lo que él quisiera.